Extasis Y Húmedad

Nuestros cuerpos extasiados sudando de placer

cuando dábamos el alma al pie del amanecer.

Nuestros cuerpos enredados en la sala en el sofá, en la cocina,

en el baño, en el piso del desván...

No necesitábamos sábanas, sin almohada daba igual; al unirse

nuestros cuerpos todo era celestial.

una vela nos iluminaba, música sensual nos arrullaba,

Se aceleraba el ritmo y aumentaba la humedad.

los gemidos que nacían de dos cuerpos desquiciados, desquiciados

de locura y de orgasmos alcanzados; los gemidos delataban supremas

sensaciones, animales salvajes fuimos en ocasiones.

Entregamos el alma y la vida en nuestros cuerpos,

ternura en las miradas, amor en cada palabra, y se encendía

la noche con la luz del fuego de nuestra llamarada.

Amor en cada roce, pasión en cada beso, fundiéndonos  tu y yo

en un volcán de pasiones y llenado cada espacio de gemidos y deseos.

Tus manos sedientas toman mis senos, montañas erguidas de placer y deseo,
esperan ser rozados en esos momentos, esperan ser amados, están ya inquietos.

Gemidos de placer consumen el hecho, llegamos al éxtasis más bello y perfecto,
un beso muy largo sella nuestro encuentro. llenando la cama de orgasmos perfectos. Uy! que locura y que delicioso es esta lujuria.