Amor Entre Primos

En muchas ocasiones, reuniones familiares, fiestas o encuentros casuales mi primo Orlando un trigueño de 18 añitos alto con unos ojos azules y un pelo negro ondulado luego de darme cuenta que yo le gustaba a mi primo y lo caliente que lo ponía cuando me veía con mis pantalones ajustados, ese día de reunión familiar note que me miraba demasiado, antes de eso jamás me había fijado ni en el, ni en  tamaño de sus ojos, pero Bueno, lo que me deparo la vida fue algo delicioso y aun lo es. Siempre intentaba estar junto a mi, me conversaba me buscaba y a el le encantaba Escuchar todas mis historias.

A veces me quedaba yo en la casa de mis abuelos que es donde el vivía  con sus padres y hermanos, el verano

En cuestión,

 Estaban mis tíos y abuelos en el cementerio, mis primos jugando fútbol, cosa que también iba yo a hacer, pero tuve que devolverme a mitad de camino ya que había Olvidado mis protectores para los, tobillos.

Entre a la casa por la puerta de la cocina y me dirigía a la habitación, en eso me detengo de súbito, estaba escuchando unos gemidos que venían desde la habitación de mi primo, la puerta estaba entreabierta, cuando me asome vi la escena más salvaje y menos pensada de mi vida, mi primo Orlando, estaba recostado cruzado en su cama, completamente desnudo, las piernas abiertas de par en par se estaba masturbándose con una mano agarraba su pene y con la otra mano se metía mis pantis en su boca chupándolos con desesperación, entre sollozos y gemidos de excitación, mencionaba mi nombre, me moría de ganas de mamárselo de inmediato, el solo escuchar como decía mi nombre Me ponla excitada, mis  deseo estaban a su máxima expresión, ya no daba mas, decidí  entrar a ocuparme de el, pero antes me asome por la ventana por  si acaso y justo, como un aviso divino, venia subiendo mi prima, la mas

Chica, así que me quedé  con las ganas, no podía hacerme masturbarme porque sino, sabrían que había estado allí, me fui rápido y al salir hice ruido para que no lo descubriera su hermano.

Desde ese momento, mi primo pasó a ser mi objetivo sexual principal, ya sabia como era cada parte de su cuerpo cuando lo veía, ahora recorría su extensa anatomía, fijándome en cada detalle, como caminaba  como Corría, me fijaba y me excitaba cuando bebía y sus labios se mojaban con el liquido, todo el era para mi un poema sexual, de echo no me importaba si el se daba cuenta como lo miraba, cierto día se acababa de levantar y estaba preparándose el desayuno y se puso a tras de la luz en la ventana y pude ver a través de su pijama la abertura de sus nalgas y como se le notaban los pendejos de pubis, me volví loca y le dije, "Orlando mmmmmm que delicia ya falta poco para ........" y paré  por que venia mi prima, el volteo y me dijo que primita no escuche bien, nada le dije, no me interesa que escuches quiero que sientas, me miró  como extrañado pero no dije mas nada.

Al día siguiente sabia que era domingo iban al supermercado, uno de mis primos se quedaba a limpiar y le tocaba a el, mis abuelos salían a misa Y mis primos a su deporte favorito al lo cual yo me reportaría enferma. Así que comencé mi plan maestro, en un momento en que el estaba en su cuarto con su hermano, me puse un short sin nada abajo mi cosita se veía atreves de la tela del short, empecé a pensar un poco en el y eso bastó  para ponerme caliente, el se veía increíble, me asomé  a la pieza de el con la blusa semi abierta y se me veían los pechos, y le pedí ayuda a el parándome directamente frente a su cabeza, el sentado en la cama quedaba a la altura de mi cintura yo veía de reojo, quedó  viendo pegado, embriagado, extasiado, mi carne que se traspasaba en el short, de manera descomunal se relamió, quiso tocarme con su manos, pero vio a su hermano al lado que estaba viendo la tele, me miró  hacia arriba, luego volvió a mirar mis nalgas y se contuvo, se paró y me ayudo a cerrar mi blusa, yo no dije nada ni siquiera lo miré, solo me di vuelta y me fui, 

Solo atinó a mirarme y llevarse un dedo a los labios, la tarea ya estaba Echa solo esperarla hasta mañana.

me levante me bañe, me perfume ligeramente y tomé un rico desayuno, le pedí a mi tía doble ración de leche, la necesitarla, mis tíos y primas chicas se fueron, mis abuelos ya se habían ido antes, solo quedaban mis primos, paso media hora y se fueron, justo cuando mi primo salía del baño recién bañadito cubierto                                 solo con una toalla y se fue al cuarto, yo estaba sola con los mismos short del dia anterior, busqué mi  blusa me la sobrepuse igual, y sin avisar, entré  al cuarto de el, yo miraba de reojo con la blusa entre abierta y caliente al máximo, tal vez el de seguro pensaba que yo no veía, se había alcanzado a poner solo su calzoncillo  blanco de algodón, se volteo  y me  dijo "prima me estoy cambiando" si le dije lo se pero ayúdame con esto, cuando el intento ayudarme a cerrar mi blusa abierta le dije no "lo que quiero es que te lo saques, sacarlo? y le  di un tirón lo saque yo misma, me dijo pero... y sin dejarlo hablar lo senté en la cama, lo puse directo viendo a mi cosita, la miró  y luego a mi, y me bajé si decir nada el short, cuando me vio con mi cosita afuera sus ojos estaban desorbitados no sabia que hacer, me miró con algo de confusión "no te preocupes cielo solo  aprovecha ahora porque quiero que me hagas el amor como nadie te lo hará, te comeré  tu pene como nunca mas sentirás y luego me culiaras bien culiada", diciendo esto de la manera más tranquila tome su pene con mis manos y lo dirigí directo a mi boca, me gusto mucho ese pedazo de carne que tenia al frente no puso ninguna  resistencia, me dijo "prima no por favor no...."  quiero ser yo quien te chupe tu cosita, llevo mucho tiempo deseando tenerte, no puse resistencia  y me acostó en la cama y empezó a chuparme los labios  y me dijo,",  esto es maravilloso, después quiero cogerte  como siempre lo he sonado, así que disfruta mi vida" dicho esto me agarro y comenzó  a chupar como condenado, tan fuerte y desesperado lo hacia que me causaba dolor, así que de un empujón lo eché asía atrás  quería zafarme, así que le dije "amor mío chupa sin que tus dientes rocen mi vagina hazlo solo con labios y lengua", y lo solté, comenzó a darme una mamada muy rica no espectacular pero había que comprender su falta de experiencia, pero me volvía loca cuando chupaba mi vagina con sus labios, y pasaba su lengua de arriba abajo, lo tire en la cama y comencé a chuparle su pene erecto sus pelotas duras se perdían en mi boca, las mame mientras mis dedos se metían un poco dentro de mi vagina, sentí un rico  orgasmo llegar, comencé a bajar mientras chupaba cada parte de su estomago y ombligo, luego me levanté  y  abrí  las piernas a lo máximo y el dirigió  sus  manos a cada muslo para que los mantuviera así de abiertas, y comenzó    a darme una comida de zorra que me hizo gritar delirar, trataba de agarrarle la cabeza para que parara, llore de gozo, su lengua se hundía en mi cueva sus labios chupaban y chupaban mis labios uterinos, mis jugos vaginales corrían por su boca, entre espasmos interminables y gritos   llegue no se  cuantas veces a uno y otro orgasmo, cuando ya mis ojos solo estaban entreabiertos y totalmente en blanco, mis labios solo balbuceaban su nombre y atinaban solo a gemir y gemir se irguió me tomo los muslo y se los puso a la altura de sus hombros, el me metió la cabeza roja e hinchada en la entrada de mi vagina roja y abierta y sin que tuviera reacción me lo mando hasta adentro abrí los ojos lo mire y cuando metió y saco  de nuevo el tremendo pene  mis manos jalaban sus cabellos

y le pedí que lo hiciera con suavidad cuando, comenzó  a bombear una y otra vez, la profundidad de la penetración era total por la posición, su miembro se perdía en la untuosidad de mi orgasmo y pequeñas salpicaduras de liquido recién vulnerado, cuando mis movimientos de cadera se hacián más lentos y mis uñas se clavaban en su espalda y mis gritos eran Más profundos, entendí que mi orgasmo por penetración estaba listo, su pene seguía hirviendo y al palo, tal como lo había planeado, yo cuando creía que todo había terminado y me disponla a abrazarlo y besarlo, me sorprendí cuando su boca volvió a comerse mi conchita y sus dedos se metían lubricados por los jugos de mí zona en mi ano, mis gemidos volvieron a la carga, ya eran dos los dedos en mi culo cuando estaba con un cm. de diámetro, me incorpore tome su sable coloque el glande ya súper rojo y gordo en mi hoyito, y comencé despacio a metérmelo, lo hice lento lento, quería saborear cada centímetro mientras lo metía el solo atinaba a pedirme por favor que lo sacara, entre sollozos y gemidos, cuando me tenia penetrada mas de la mitad comencé a meterlo mas fuerte hasta que me  incrustó totalmente, su tallo se perdió en su ano, y así culiandome en posición patas al hombro nuestras caras estaban frente a frente, le decía que ya yo era su mujer, desde ese día  solo yo iba a tener derechos sobre el, y el me abrazaba mas y solo aguantaba las mamadas que le hacia, me dijo que no quería ningún hombre mas en mi vida, y de un empujón me dijo que si que seria solo el, así cuando estaba por tener mi orgasmo el me pedía que se lo mamara que ya el se vendría también, que ya no podía aguantar mas, le dije no puedo y comencé a tener mi orgasmo, nos revolcamos, y me dijo, por que había hecho eso sin mas ni más, le conteste, que eso era lo que el quería, me contesto es verdad pero como lo supiste, solo conteste, leí tu mente Mientras tu disfrutabas de mi, sin mas. Nos reímos y así fue como  mi primo y yo  hicimos el amor en una sola mañana.